A tu lado, respirando profundamente asombrado de mi estado casi etéreo en el que me hallaba, pero de repente me entró el pánico, pronto ese momento pasaría y volvería a mi vida insustancial.
Decidí que tenía que retener ese momento en la memoria para rememorarlo cuando tuviera dolor de cabeza de tanto tedio.
Recordé las últimas técnicas nemotécnicas de la señorita Pepi, y empecé por memorizar tu olor. Empecé por distinguir el olor de tu perfume, entre vainilla y bergamota y pétalos de rosa. Pero me di cuenta que lo que realmente me atraía tu epidermis, me acerque para olerla nuevamente y comprobar que el calor de tu piel tenia el olor del hechizo, de la obsesión, sin olvidarme de la distinguir el calor que emitía tu piel.
Miré tus caderas de curvas de carretera de l último spot de mercedes. Y tus pechos con la tensión y densidad de la arena saturada del mar. Tus ojos, esos, no los podría olvidar ni queriendo. Y tu pelo de ondulado e indomable azabache.
Incluso la música de EBG no dejaría de sonar en mi cabeza.
Tres días después ya tenía ganas de ti, porque la paradoja fue que tu recuerdo no servia para saciarme sino que no hacía más que de aumentar mi angustia por no tenerte a mi lado.
Pero tanto recordar, tu piel, tu olor , tus ojos, me olvidé de recordar dos cosas, que me han atormentado todos mi vida, tu nombre y tu teléfono. Desde ese momento decidí perder la memoria.
No despertéis ni hagáis velar al amor,
ResponderEliminarhasta que quiera
Do not arouse or awaken love
until it so desires
El hechizo que te enseñó la bruja ya no te sirve ahora
ResponderEliminarporque ni yo puedo abandonarte, ni tu puedes desprenderte de mi
De mi querido Oscar Wilde para mi querido Amnesico...
Misugu