 No podía esperar más a ser fotografiada, estaba sola y el teléfono no dejaba de enviarle sms, al principio sugerentes siguiendo su clandestino código seductor. Los mensajes casi pornográficos estaban haciendo un hueco entre su minúscula ropa interior.
No podía esperar más a ser fotografiada, estaba sola y el teléfono no dejaba de enviarle sms, al principio sugerentes siguiendo su clandestino código seductor. Los mensajes casi pornográficos estaban haciendo un hueco entre su minúscula ropa interior.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
 
 
 
 
 
 
epp contiuna... qui és PP?
ResponderEliminar